
Los argentinos elegirán presidente el 22 de octubre, atormentados por una inflación de cerca de 140%, con los nervios crispados por una crisis cambiaria y las cuentas públicas exhaustas por falta de divisas, una bomba que buscará desactivar el gobierno que asuma el 10 de diciembre.
Tras décadas de alta inflación, los argentinos desconfían del peso. Desde el 2019 rigen controles de cambio que derivaron en una madeja de restricciones. El dólar ‘blue’, o paralelo, saltó de 850 pesos a 1,050 la semana pasada. A finales de julio estaba en la mitad. La brecha con el dólar oficial, en 365 pesos, es un abismo.
“El dólar puede seguir subiendo porque no hay ancla política”, señaló Elizabeth Bacigalupo, economista en jefe de la consultora Abeceb.
El mercado “piensa que Bullrich o Massa pueden imponer un plan de estabilización, pero lo que propone Milei es disruptivo y hay temor”, acotó.
Lorenzo Sigaut Gravina, economista y director de la consultora Equilibra, indicó además que “la economía no crece” y previó que en el 2023 la actividad se contraerá 2%.
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Argentina sufrió este año una sequía histórica que golpeó al campo, el principal sector exportador. Dejó de percibir por ello unos 20,000 millones de dólares (cerca de 3 puntos del producto bruto interno).
Ese golpe llevó al Fondo Monetario Internacional a relajar las metas del programa por 44,000 millones de dólares que tomó Argentina en el 2018.
Para cumplir sus compromisos, el país recurrió a un préstamo de Catar, yuanes de un swap (intercambio de monedas) con China y un préstamo puente de la CAF.
Las reservas totales del Banco Central rondan los 25,000 millones de dólares. “Pero las netas son negativas en 5,000 millones de dólares y sigue gastando los últimos cartuchos para sostener el tipo de cambio porque Massa todavía tiene chances de ganar”, evaluó Bacigalupo.
El Banco Central absorbe la fuerte emisión monetaria para financiar el déficit fiscal, con títulos de corto plazo a tasas muy altas.
“Se necesitará un plan de estabilización y quien lo aplique deberá tener poder político porque las medidas generarán más inflación hasta que en abril ingresen los dólares de la cosecha”, advirtió Sigaut Gravina.